Tormenta de Granizo Devasta la Producción Frutícola en Río Colorado.audio-

Audio: Ariel Campos, secretario de la Cámara Frutícola de Río Colorado

Un torrencial aguacero acompañado de granizo ha dejado un rastro desolador en la región frutícola de Río Colorado. La violenta tormenta, que sorprendió a los productores a días de la esperada cosecha, ha causado estragos significativos en los cultivos, generando pérdidas severas y dejando a muchos chacareros en una situación de desastre.

Varios productores frutícolas manifestaron su desolación al ver cómo la fruta que habían logrado resguardar de las heladas quedó destruida por el granizo. “Prácticamente en carozo los daños están entre un 90 y 100% y en manzana arriba del 70% “, lamentó Ariel Campos, secretario de la Cámara Frutícola de Río Colorado, reflejando el sentir generalizado entre los afectados.

La magnitud de los daños ha llevado al presidente de la Federación de Productores, Sebastián Hernández, a movilizarse de inmediato hacia la localidad. La urgencia por evaluar y cuantificar las pérdidas resalta la gravedad de la situación en este importante sector agrícola.

La producción frutícola, que se encontraba en la etapa final de preparación para la cosecha, se ha visto golpeada abruptamente por este fenómeno climático que ayer golpeo a las localidades de Allen, General Roca, y Villa Regina. La incertidumbre y el desaliento predominan entre los productores, quienes se enfrentan a la difícil tarea de evaluar los daños, así como buscar alternativas para subsistir ante esta lamentable catástrofe natural.

Se espera que las autoridades locales coordinen esfuerzos para brindar apoyo y asistencia a los afectados por esta devastadora tormenta, mientras se espera de la Secretaría de Fruticultura rionegrina una evaluación detallada de los impactos económicos y la implementación de posibles medidas de ayuda y recuperación para la comunidad agrícola de Río Colorado.

El golpe de esta tormenta ha dejado una marca profunda en la producción frutícola, recordándonos la vulnerabilidad que enfrentan los sectores agrícolas frente a la impredecible furia de la naturaleza.

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