Asistencia a Productores Afectados por el Incendio en El Bolsón: Un Rescate en Marcha

El devastador incendio que azota a El Bolsón desde hace varios días ha dejado un saldo trágico: una víctima fatal, más de 3.000 hectáreas arrasadas y decenas de familias afectadas. Ante esta situación crítica, la Provincia de Río Negro, a través de la Subsecretaría de Ganadería Ovina y Caprina, puso en marcha un operativo de asistencia para los productores damnificados, con la distribución de alimento para el ganado en las zonas más perjudicadas.
El primer cargamento, compuesto por 800 fardos, fue entregado en el depósito municipal y en la zona de Mallín Ahogado, una de las más golpeadas por el fuego. Las autoridades confirmaron que la asistencia continuará con nuevas entregas en los próximos días, incluyendo un segundo envío programado para mañana y el refuerzo de ayuda para productores de El Manso.
El operativo de emergencia se coordina con la delegación local del Ministerio de Producción, la Municipalidad de El Bolsón y la Comisión de Fomento de Mallín Ahogado, en un esfuerzo conjunto por mitigar el impacto de la catástrofe. “Seguimos trabajando para acompañar a los productores y reforzar la asistencia según las necesidades”, indicaron fuentes oficiales.
Un Incendio con Causas Deliberadas
Mientras la ayuda avanza, las investigaciones sobre el origen del fuego también arrojan resultados preocupantes. El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, confirmó que existen pruebas que acreditan la intencionalidad del incendio. “Hemos encontrado el recipiente que pudo haberlo originado”, afirmó, agregando que también se halló una botella con combustible y se cuenta con testimonios de testigos que observaron a personas en “actitud sospechosa”.
El fuego, que ya lleva más de cuatro días activo, no solo ha causado un desastre ecológico sino también humano. La víctima fatal, un vecino de Mallín Ahogado, logró escapar del foco del incendio pero regresó para rescatar a sus perros y no logró salir con vida. Además, se contabilizan al menos 88 viviendas destruidas, y las autoridades advierten que el número podría ascender a 120. También se han perdido galpones, aserraderos, gallineros y una gran cantidad de animales, mientras que el daño ambiental en la región es incalculable.
Las condiciones climáticas han agravado la propagación del incendio, con temperaturas que rondan los 30°C, vientos de hasta 50 km/h y una baja presión que favorece la formación de “bolas de fuego”, dificultando el trabajo de los brigadistas.
Una Tragedia con Consecuencias a Largo Plazo
La situación en El Bolsón refleja una problemática recurrente en la región: incendios forestales de gran magnitud que, en muchos casos, tienen origen intencional. Si bien las autoridades no han vinculado el hecho con grupos organizados, Weretilneck señaló que este tipo de ataques suelen estar relacionados con conflictos sobre el uso del territorio y la explotación de recursos.
Mientras los esfuerzos se concentran en controlar las llamas y asistir a los damnificados, queda en evidencia la necesidad de reforzar la prevención de incendios en zonas vulnerables y de actuar con mayor rapidez ante los siniestros. En este contexto, la ayuda a los productores no solo busca mitigar las pérdidas inmediatas, sino también garantizar la reconstrucción del tejido productivo en una región clave para la economía ganadera y agrícola de Río Negro.
La emergencia aún no ha terminado, y el desafío que queda por delante es enorme. Pero, en medio de la desolación, la asistencia a los productores afectados representa un paso fundamental para la recuperación de una comunidad golpeada por el fuego
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