Crisis fluvial paraliza a productores ganaderos: la odisea de llegar a Villa Regina (RN) sin balsa.-audio-
En una situación que amenaza la estabilidad de los productores ganaderos de la margen sur del Río Negro, la falta de habilitación de la balsa que conecta la margen sur con la ciudad de Villa Regina se ha convertido en un verdadero padecimiento. Los productores se ven obligados a recorrer distancias asombrosas de hasta 100 kilómetros debido a la suspensión del servicio por trabajos de mantenimiento que se prolongan desde hace meses.
La anterior administración del municipio, responsable del servicio fluvial, decidió suspender la actividad de la balsa para realizar refacciones, dejando a los productores sin una vía directa para llegar a Villa Regina. Esto ha generado un escenario desafiante para quienes dependen de la balsa para realizar gestiones y compras en la ciudad.
La falta de acceso directo ha llevado a los productores a buscar alternativas, siendo los puentes de Valle Azul y General Roca las opciones disponibles. Sin embargo, estas rutas adicionales imponen una carga significativa en tiempo y recursos a los productores, quienes se ven forzados a recorrer distancias extra y sortear obstáculos adicionales como el mal estado de los caminos.
Miguel Railen, un productor de ganado de la margen sur del Río Negro, compartió su experiencia y las dificultades que enfrentan diariamente. En una entrevista exclusiva, señaló la inconveniencia y los contratiempos que han surgido debido a la suspensión de la balsa. “Esta situación nos afecta directamente en nuestras operaciones diarias. El secretario del intendente de la administración actual nos comento que las refacciones salen muy caras”, expresó Miguel.
La incertidumbre sobre la fecha de reactivación del servicio de la balsa agrava la situación, ya que los productores no cuentan con un horizonte claro para la normalización de sus actividades. Las llamadas de atención se multiplican, exigiendo respuestas concretas por parte de las autoridades municipales sobre las acciones que tomarán para resolver este problema que está afectando directamente a la economía local.
La falta de una solución inmediata pone de manifiesto la vulnerabilidad de los productores ganaderos frente a las decisiones administrativas y la importancia crítica de la infraestructura fluvial para el desarrollo económico de la región. Mientras tanto, la odisea de recorrer distancias extraordinarias persiste para aquellos que luchan por mantener sus negocios a flote en la margen sur del Río Negro.
