Plena conectividad en los puestos de control de la Barrera Sanitaria Patagónica

Tras colocar una antena V-Sat, el Senasa logró que el 100% de los puestos de control tengan acceso a internet lo que facilita el trabajo del personal en el cuidado de los consumidores.

photo-2019-07-16-23-22-382El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) dio un nuevo paso en el fortalecimiento de su Barrera Zoofitosanitaria Patagónica al colocar una antena V-Sat que permite que todos los puestos de control tengan acceso a internet.

En los tiempos que corren es difícil pensar cualquier actividad sin su relación al uso de las nuevas tecnologías de la información y el acceso a internet, por eso concluir la conectividad de todos los puestos de control de la Barrera Zoofitosanitaria Patagónica es importante para sostener el estatus de la producción ganadera y frutihortícola alcanzado por la región.

El pasado 16 de julio, agentes de la Dirección de Tecnología de la Información del Senasa concluyeron los trabajos de conectividad en el Puesto de Pata Mora, ubicado sobre la Ruta Provincial Nº 180, en el límite entre las provincias de Neuquén y Mendoza. De esa manera se concretó el objetivo de dar cobertura a todos los puestos de la Barrera Zoofitosanitaria Patagónica.

El pasado 16 de julio el inspector que trabaja en ese puesto realizó su primera acta digital, retornando a origen a un transporte que llevaba un caballo sin la documentación sanitaria obligatoria.

Hasta el momento, Pata Mora nunca había tenido acceso a internet, ya que en la zona no existen proveedores a quienes contratar el servicio. Para solucionar esta falta se decidió desmontar una antena de ARSAT que estaba colocada en el Puesto de San Antonio Oeste, en Río Negro, y llevarla hasta el norte neuquino: tarea que realizaron los agentes de la DTI del Senasa.

Esta conectividad no solo redunda en una mejor calidad en las prestaciones que brinda el Senasa, sino que en este caso impacta positivamente en las condiciones de trabajo de quienes se desempeñan en lugares muy alejados de los centros urbanos y de los servicios básicos –como el caso de Pata Mora– con caminos difíciles de transitar y donde no siempre funcionan bien las comunicaciones telefónicas.