Pensar la producción animal con anticipación: el desafío de planificar para los próximos meses
Desde el INTA Villa Regina proponen detenerse a reflexionar sobre un aspecto clave para el desarrollo ganadero en la región: la planificación anticipada de la producción animal, tanto en los valles irrigados como en las zonas de secano. La propuesta apunta a pensar hoy lo que ocurrirá en los próximos meses, anticiparse a los desafíos productivos y reducir las falencias que año tras año impactan en los sistemas ganaderos del norte patagónico.
En este sentido, la médica veterinaria Mónica Feice, del equipo técnico del INTA Villa Regina, plantea la necesidad de que los productores revisen con tiempo sus esquemas de manejo, sanidad, nutrición y disponibilidad de agua. Prepararse antes del verano no solo permite sostener los índices productivos, sino también minimizar las pérdidas y evitar decisiones reactivas que suelen ser más costosas.
Los sistemas del Alto Valle y los del secano presentan realidades diferentes, pero comparten un mismo desafío: producir de manera sostenible en un contexto climático variable y con recursos cada vez más ajustados. En los valles, donde la ganadería convive con la fruticultura y la horticultura, la competencia por el uso del agua y del suelo exige una mirada más integral. En el secano, en cambio, el acceso al forraje y la gestión del agua son condicionantes estructurales que obligan a planificar cada movimiento.
Desde el INTA destacan que anticiparse es la mejor herramienta para sostener la productividad y el bienestar animal. Esto implica evaluar el estado corporal de los animales, programar la suplementación estratégica, prever la disponibilidad de alimento conservado, realizar los controles sanitarios a tiempo y asegurar el abastecimiento de agua de buena calidad. Cada una de estas acciones, aunque parezcan rutinarias, se vuelve determinante cuando las condiciones ambientales se vuelven extremas.
El enfoque preventivo cobra especial relevancia ante los efectos cada vez más visibles del cambio climático. Sequías prolongadas, olas de calor y eventos meteorológicos extremos exigen a los productores adoptar un manejo más técnico, basado en la previsión y la toma de decisiones informadas. En ese sentido, la planificación ya no es una opción, sino una necesidad para sostener la rentabilidad y la resiliencia del sistema ganadero regional.
El INTA Villa Regina trabaja en la difusión de herramientas y capacitaciones destinadas a acompañar este proceso. La transferencia de conocimiento y la articulación con productores, cooperativas y municipios son pilares para fortalecer la capacidad de respuesta de cada establecimiento. El desafío está en transformar el “día a día” en una gestión planificada que contemple el largo plazo y priorice la sustentabilidad.
Pensar en lo que viene —como propone la médica veterinaria Felice— significa mirar más allá de la temporada actual. Significa entender que la producción animal se construye con anticipación, conocimiento y compromiso, factores decisivos para sostener la actividad en los valles y en las zonas de secano de Río Negro.
La nota a la Medica veterinaria Monica Felice, disponible en todas nuestras plataformas de audio.