La ola de calor causa estragos en los cultivos hortofrutícolas del sur y este de Europa

En los Balcanes, Italia y Grecia, Lucifer está elevando las temperaturas por encima de los 40 ºC, por lo que las cosechas se marchitan. En Italia, hacía 60 años que el tiempo no era tan seco. El medio italiano Telenord informa de que muchas frutas y hortalizas están madurando más rápido que en los años anteriores. En el mercado todavía se puede encontrar mucho producto fresco, pero determinados productos comenzarán a escasear en las próximas semanas, como, por ejemplo, los tomates, las berenjenas y los pimientos. Además, el calor también afecta a las cosechas de otoño e invierno, como las coles y las hortalizas de hoja.

Maurizio Ventura, de Sun World Italy, nos habla un poco sobre la situación de la uva en Apulia y la de la fruta de hueso en la Emilia-Romaña.

“Por suerte, todavía hay agua de sobra a disposición de los productores en las dos regiones. Utilizan principalmente el riego por goteo y eso permite una buena distribución del agua disponible en comparación con otros sistemas. Gracias a esta solución técnica, los productores todavía no se han enfrentado a limitaciones concretas. En Apulia, ello da lugar a uvas de muy buena calidad, con niveles Brix altos. Además, no hay que tratarlas tanto contra enfermedades fúngicas”, explica. En la Emilia-Romaña, el contenido de azúcar de la fruta de hueso es muy buena. “El calor ha quemado un poco algunos cultivos y, además, el tamaño de la fruta se ha visto afectado: por lo general, los calibres son algo menores que en años pasados. La recolección de determinadas variedades está más concentrada y llevan unos diez días de adelanto con respecto a 2015”.

Según informaba la autoridad italiana Coldiretti Puglia a comienzos de este mes de agosto, los precios se han desplomado. Las sandías cuestan menos de 10 céntimos por kilo, otros melones menos de 30 céntimos. además, hortalizas como el calabacín, el pimiento y los tomates se pueden adquirir a precios baratos. En junio y julio, se cosecharon al mismo tiempo muchas frutas y hortalizas y ahora están inundando el mercado.

España
La ola de calor de España no es grave para la agricultura, aunque sí que se están sintiendo sus efectos en cierto modo. Ya ha provocado que se adelante la cosecha de la fruta de verano y provocado que unas zonas productoras choquen con otras, así como una gran concentración de la oferta a principios de verano. En estos momentos las cotizaciones del melón y la sandía están empezando a recuperarse.

En la cuenca del Segura, que incluye Murcia, sur de Alicante y un pequeña parte del este de Almería, la sequía podría ser un problema para la próxima temporada si no llueve pronto podría haber problemas. La cuenca del Segura es la única que presenta lo que se denomina “déficit hídrico estructural”. Debido a su escaso régimen de lluvias, siempre ha necesitado de aportaciones externas: del trasvase desde el río Tajo, de algunos acuíferos y de la desalinización.

La media de aportaciones del Trasvase en los últimos 10 años sobrepasaba los 300 hm3/año, si bien se planeó inicialmente para trasvasar 600 hm3. La sequía que viene sufriendo los pantanos en la cabecera del Tajo (Entrepeñas y Buendía) este año es lo que ha provocado que desde hace un mes no puedan derivarse nuevos caudales hacia el sureste, en tanto esos pantanos no recuperen un nivel mínimo que el 1 de enero será de 400 hm3 embalsados, de acuerdo con las estrictas reglas de explotación del trasvase. Esto es lo que nos ha llevado a Proexport y a las organizaciones agrarias a exigir al Gobierno central la adopción de medidas excepcionales en el corto y en el medio plazo para asegurar el regadío en el sureste de España y dar así certidumbre a agricultores y clientes. En el largo plazo, un Plan Hidrológico Nacional debería recoger y armonizar las necesidades e inversiones a realizar en el conjunto de las Cuencas de toda España, pero el debate territorial en el país aleja las posibilidades de un fácil acuerdo.

De momento, según Proexport, los agricultores ya han programado con sus clientes los suministros de hortalizas para la campaña 2017/ 2018 y esperan proceder a plantar a partir de finales de este mes.

En Castilla-La Mancha, en el interior del país, las temperaturas no bajan de los 40º grados centígrados y el ambiente es muy seco, lo cual está acelerando el crecimiento de las cebollas tardías y de larga conservación, por lo que los calibres serán mucho menores.

Según algunos importadores belgas, el efecto de calor no se ha notado en los envíos españoles. Cédric Geens, de Jonckheere, indica que el calor que está haciendo en España no se puede calificar de extremo, según muchos proveedores españoles. “Para ellos, es un verano normal. en cuanto a condiciones meteorológicas, la primavera fue perfecta, con abundancia de lluvia, noches frescas y buen tiempo durante el día. La cosecha se ha adelantado diez días”.

Según Geens, la oferta no ha disminuido. “Al contrario, hay mucho comercio este año, y para todos los productos, de hecho. En estos momentos, tenemos un gran suministro de todo tipo de fruta de hueso y melones”. Añade que en Bélgica cuesta vender más que otros años. “Se podría achacar al periodo vacacional. La gente se va de vacaciones más a menudo y durante más tiempo porque hay más oferta de billetes de avión económicos”.