Investigadores del INTA Alto Valle reconocidos internacionalmente
NOTA CON AUDIO: Ing. Silvina Garrido, INTA Alto Valle.
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En contacto con Agrovalle, FM Del Sol, la ingeniero, Silvina Garrido explica que ella y los profesionales Jonatán Lago, y Liliana Cichón , investigadores de la EEA Alto Valle del INTA, obtuvieron este logro importante para la región.
La convocatoria -de carácter internacional- es impulsada y coordinada por la Red Innovagro, y el IICA (Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura), cuya finalidad es reconocer la innovación generada en el sector agroalimentario, que contribuyan a mejorar la productividad, la competitividad, la sustentabilidad y la inclusión social, así como valorar el esfuerzo, las soluciones, la originalidad y la disciplinas de grupos para beneficio de las cadenas agroalimentarias.
El equipo representó a la Argentina y específicamente al INTA, y debió competir con 21 proyectos en su categoría, de distintos países como Brasil, Chile, España, Holanda, México, y Perú entre otros.
El trabajo “Incorporación de agentes de control biológico nativos en el manejo sanitario de plagas de frutales”, verdaderamente constituye una innovación en el manejo sanitario de frutales explican los investigadores: “Es la primera vez que se multiplica a gran escala una especie nativa y la misma es utilizada exitosamente para el control biológico de carpocapsa”.
El proyecto presentado fue una investigación realizada en la región del Alto Valle, en la cual se implementó una estrategia sanitaria de bajo impacto ambiental con cuatro herramientas básicas: el control biológico con especies nativas, feromonas de confusión sexual, uso de corredores biológicos y el monitoreo constante. La experiencia se repitió tres temporadas y en todas ellas se logró el mismo resultado: éxito total en el control de las plagas con una disminución en el el uso de insecticidas en un 80%, minimizando el impacto ambiental; los costos económicos, el uso de maquinaria; el consumo de combustibles fósiles y agua. Por otra parte, la condición nativa del controlador biológico utilizado, evita la introducción de especies indeseadas y garantiza el equilibrio ecológico del agroecosistema.
Si bien teníamos la seguridad de que el proyecto era innovador y de alto impacto socio-ambiental, nuestras expectativas no eran muy altas, dado el carácter internacional del concurso y el nivel de trabajos presentados en esta convocatoria. De todos modos, deseábamos dar a conocer el proyecto a la comunidad, y demostrar que es posible el uso de biocontroladores en fruticultura, explicaron los profesionales.
El equipo premiado está formado por tres investigadores de INTA Alto Valle que trabajan desde el año 2004 en el desarrollo de técnicas de control biológico de plagas de frutales. En septiembre de 2018, al inaugurarse el CEMUBIO (Centro Multiplicador de Biocontroladores Nativos) se afianzó el desarrollo de tecnologías para la producción masiva de enemigos naturales autóctonos, con la producción adicional de material biológico para la ejecución de más de 6 tesis doctorales, posdoctorales y proyectos de investigación que evalúan algunos de estos bioinsumos, en varias regiones y cultivos del país.