Desafío en Río Negro: El Veto de la Gobernadora al Tarifazo Eléctrico enfrenta obstáculos ante el respaldo del Ejecutivo
En Río Negro, el intento por detener el aumento en las tarifas eléctricas a través del veto de la gobernadora Arabela Carreras ha desatado una intensa controversia, con empresarios, comerciantes y dueños de pymes alzando la voz en oposición, mientras que desde el Ejecutivo rionegrino se mantiene firme en la aprobación de la ley. Este enfrentamiento ha dejado al descubierto las tensiones entre el sector productivo y el Gobierno provincial, generando incertidumbre sobre el futuro de las tarifas eléctricas en la región.
La polémica surge a raíz de la creación por Ley Provincial del Fondo Complementario de Desarrollo Eléctrico (Focde), presentado por el Ejecutivo como una herramienta esencial para impulsar el crecimiento y la infraestructura en el ámbito energético en los próximos años. Sin embargo, esta iniciativa no ha sido recibida con agrado por diversos sectores, especialmente aquellos que temen las repercusiones económicas de un aumento en las tarifas eléctricas.
Empresarios, comerciantes y dueños de pequeñas y medianas empresas de Río Negro se han unido para expresar su descontento y solicitar el veto por parte de la gobernadora Arabela Carreras. Argumentan que un incremento del 5 por ciento en las boletas eléctricas impactaría negativamente en la ya delicada situación económica del sector productivo, afectando la rentabilidad y la capacidad de inversión de las empresas locales.
En respuesta a estas inquietudes, el Gobierno provincial ha afirmado que el cobro adicional del 5 por ciento no será inmediato, buscando calmar las preocupaciones del sector productivo. Sin embargo, esta declaración no ha logrado disipar las dudas y la resistencia persiste.
Desde el Ejecutivo, se insiste en que el Focde es una medida necesaria para garantizar el desarrollo sostenible del sector eléctrico en Río Negro. Destacan que este fondo proporcionará los recursos necesarios para impulsar proyectos de infraestructura, mejorar la capacidad de generación y fortalecer la red eléctrica, lo que, a largo plazo, se traducirá en beneficios para la comunidad.
La incertidumbre recae ahora en la decisión de la gobernadora Arabela Carreras respecto al veto solicitado. Expertos sostienen que las probabilidades de que el veto se concrete son bajas, dado el respaldo del Ejecutivo a la ley. Esto deja al sector productivo en una posición vulnerable, enfrentándose a un escenario en el que el aumento de las tarifas eléctricas parece inevitable.
La disputa en Río Negro refleja los desafíos recurrentes entre el desarrollo económico y las necesidades del sector productivo, resaltando la compleja tarea de equilibrar el crecimiento del sector eléctrico con las preocupaciones legítimas de los contribuyentes y empresarios locales. El desenlace de este conflicto no solo determinará el rumbo de las tarifas eléctricas en la provincia, sino que también podría sentar un precedente para futuras disputas entre el Gobierno y el sector productivo
