CAFI: El tipo de cambio no es una variable suficiente, pero sí necesaria.
La cámara Argentina de fruticultores integrados (CAFI) emitió un comunicado en referencia a los dichos del ministro de Economía, Nicolás Dujovne, en una entrevista efectuada por el diario Río Negro y en el que el titular de la cartera de economía expreso que el retraso cambiario no esté afectando el desarrollo de las economías regionales.
El comunicado manifiesta lo siguiente:
En las últimas semanas hemos leído y escuchado algunas expresiones vertidas en cuanto a que el problema de la fruticultura no es el tipo de cambio, que el sector tiene cambios que hacer para ser competitivos.
Con el fin de evitar lecturas parciales, como entidad que representa a los productores integrados de manzanas y peras de la región, (región que produce y comercializa más del 85 % de esos frutos de Argentina), queremos expresar nuestra posición.
– Lo hemos dicho siempre: la fruticultura es una actividad exportadora, y como tal, sin bien hay otras variables que influyen en la competitividad del sector, el tipo de cambio real es una variable protagónica
– Coincidimos en que tenemos que hacer cambios en materia de producción, incorporación de tecnología, etc. No obstante, esos cambios no se hicieron a la velocidad que hubiéramos querido, porque producir y comercializar, no fue rentable
– La falta de rentabilidad fue demostrada por todas las organizaciones del sector y organismos del Estado reiteradamente, como así también la causa: una actividad exportadora, en una economía de alta inflación, con un tipo de cambio bajo, nos lleva a costos en dólares con los que es imposible competir a nivel internacional
– Por otra parte, los impuestos al trabajo tienen un fuertísimo impacto en los costos (pagamos 10 veces más con respecto a los principales competidores), máxime teniendo en cuenta que nuestra actividad es mano de obra intensiva, a diferencia de otras actividades agroexportadoras del país que tienen una muy inferior incidencia del costo laboral
– Se han tomado medidas de impacto positivo en el sector y confiamos en que seguirán apareciendo otras medidas económicas necesarias. No obstante, no podemos dejar de expresar que nos preocupa que estamos enfrentando otra temporada como la que esta a punto de iniciar, con costos que crecen más que la variación del tipo de cambio, es decir, se repite la causa originaria.
– No estamos pidiendo una devaluación, pero si advirtiendo que mientras el tipo de cambio vaya por detrás de la inflación, volvemos al escenario por todos conocido, al que no queremos volver.
Finalmente, reiteramos nuestra vocación por trabajar todos juntos para encontrar las salidas necesarias que le den a la fruticultura sustentabilidad en el largo plazo.
• “Los problemas de la fruticultura no vienen por este tipo de cambio; vienen desde hace mucho tiempo. Y no se pueden atribuir al dólar, que, por otro lado, en más competitivo que el que teníamos con el kirchnerismo”.
• “Hay que tener una política crediticia que ayude al sector, una reconversión productiva con programas que puede impulsar la provincia o el ministerio de la Producción, mejorar en logística y el trabajo que hagan las empresas para poder acomodar sus costos”.
• “Han caído los precios de los productos que exportamos, los agrícolas, y han aumentado los de la energía, en lo que Argentina es importador neto”.