La exportación de frutos secos en Río Negro creció un 38% en 2019

Entre mayo y agosto se exportaron cerca de 560 toneladas de frutos secos, lo que significa un incremento de un 38% en relación al volumen exportado el año anterior.

Las nueces y avellanas rionegrinas se venden hoy principalmente a Italia y Chile, y este año, productores provinciales formaron parte de una experiencia regional que envió producto a Dubai.

“En este escenario que sigue siendo favorable para la producción de frutos secos, quiero destacar el aumento que se vio este año en la exportación de nueces con cáscara. En 2019 se exportó el doble en relación al año anterior, llegando así a las 178 toneladas”, explicó al coordinadora del Departamento de Frutos Secos, Yanina di Nardo.

El destino de las nueces rionegrinas es principalmente Italia. Sin embargo, este año se observó un caso de exportación a nivel regional. “Desde Picún Leufú, Neuquén se exportó con destino a Dubai. En esta experiencia participaron productores rionegrinos con 10 toneladas de nueces. Fue una exportación regional que se dio gracias al trabajo que desde hace años viene haciendo el Cluster de Frutos Secos de la Norpatagonia”, agregó la profesional del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca.

También por segundo año consecutivo un grupo de productores de Lamarque vendió 96 toneladas de nueces con cáscara al mercado italiano, luego de clasificarlas en la Planta Comunitaria de Postcosecha local. A estas experiencias, se suma también la exportación directa de una empresa ubicada en General Roca que envió 30 toneladas de su propia producción.

El caso de las avellanas es distinto, “porque cerca del 50% de lo que se produce en nuestro territorio es directamente para exportar. También hubo un incremento, aunque fue menor. Lo que sucede es que las plantaciones, ubicadas en el Valle Inferior, van aumentando su producción y lógicamente se vende y exporta más”. Este año se enviaron a Chile, único destino de exportación, 379,7 toneladas, principalmente para la industria chocolatera y de golosinas.

“Lo interesante en este contexto es que el aumento de la exportación no sólo beneficia al exportador, sino también a todos los productores que venden en el mercado interno. Porque, a nivel nacional, principalmente en nueces, nuestra país ya se autoabastece, y se está produciendo lo que se llama saldos exportables”, explicó la profesional. Estas exportaciones evitan que el mercado interno se sature. “Cuando pasa esto, el productor pierde poder de negociación en la venta y ese menor el precio que obtiene”

Río Negro cuenta con 1.900 las hectáreas destinadas a la producción de nueces, avellanas, almendras y nuez pecán distribuidas principalmente en el Valle Inferior, donde hay 974 hectáreas sembradas, Valle Medio tiene 613 hectáreas, y al Alto Valle cuenta 311. Hoy existen más 150 establecimientos dedicados a la actividad.

Para seguir exportando es “muy importante que los establecimientos trabajen en los proceso de cosecha y postcosecha, para poder mantener la calidad de los frutos secos”. Desde el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca se ofrecen distintas líneas de financiamiento para la compra de implementos agrícolas y, agregado de valor, incluso se puede financiar los equipos de defensa contra heladas. El MAGyP financió de esta forma la compra de una remecedora para una empresa del Valle Inferior y un galpón postcosecha a través de la línea de agregado de valor.